Monday, July 26, 2010

¿De qué te ríes, Sobeida?

Sobeida Félix Morel fue la concubina de uno de los más buscados narcotraficantes en el Caribe, José David Figueroa Agosto. Digo fue, porque ahora el narco, conocido como Junior Cápsula, está preso sin derecho a fianza en el Centro de Detención Federal en Puerto Rico luego de su arresto en la isla. Su caso con el gobierno fedral de los Estados Unidos de América, increíblemente, no tiene que ver con el trasiego de drogas, sino con la obtención de un pasaporte mediante fraude y engaño.

Localmente, Junior Cápsula cumplía en Puerto Rico una condena por asesinato. En 1995 fue ingresado a la cárcel por la muerte de Arnaldo Martínez con los agravantes de secuestro, conspiración y violación a la Ley de Armas de Puerto Rico. 

Cuatro años más tarde, esta "joya" de hombre logró burlar al sistema carcelario en noviembre de 1999 presentando una orden de excarcelación falsa. De ahí, partió raudo y veloz a la República Dominicana, donde se estableció como uno de los "big shots" de la droga. Subió como la espuma. Se hizo amigo de gente influyente, adinerados, profesionales y quién sabe si hasta de gente del gobierno. Básicamente, campeaba por sus respetos. Sus muchas propiedades y vehículos incluyen al menos dos apartamentos de más de medio millón de dólares y autos deportivos con los que muchos jóvenes honestos y trabajadores sueñan toda su vida y, a fin de cuentas, nunca podrán pagar.

Su aventura terminó en la Calle Loíza, cerca de San Juan, Puerto Rico, el 17 de julio de 2010.
Allí fue capturado por agentes de la DEA (Drug Enforcement Administration o Administración Federal Antidrogas) .

 (Ver continuación del artículo más abajo)

Lecturas Interesantes:
DROGA: DESINFLANDO EL GLOBO. Narcotráfico, Corrupción y Opinión Pública en el Perú 

Noventa dias: ¿para qué? (la corrupción política, el tráfico de drogas y las relaciones de México con los Estados Unidos)(TT: Ninety days: what for?) (TA: ... U.S.)(Editorial): An article from: Siempre!

La cúpula militar, infectada por narcotráfico y corrupción.(TT: The military cupola, infected by drug trafficking and corruption.): An article from: Proceso
 Continuación:
 Al ser un hombre joven y con dinero, el tal Junior Cápsula tenía su encanto con las chicas. Su esposa legal anda prófuga en Francia, pero acá en el Caribe sostenía relaciones con dos jóvenes que, por cierto, eran antes las mujeres de sus socios. Una de éstas es la gran Sobeida.

Resulta que la tal Sobeida es legalmente la mujer de Eddy Brito, un supuesto socio de Junior. Una vez Junior sintió que ya no estaba seguro en la República Dominicana, regresó a Puerto Rico y se instaló en Isla Verde. Su físico había cambiado. Hasta lucía el cabello alisado y un perfil más fino. No sé si se la trajo, o si ella vino voluntariamente, pero lo cierto es que Sobeida y su hermana estaban en Puerto Rico al momento del arresto de Junior.

El día que arrestaron a Junior, la Sobeida se entregó y fue deportada a la República Dominicana, donde enfrenta juicio junto a otras personas por complicidad en el trasiego de drogas.

La Sobeida tiene dos hijos y ninguno de los medios dice qué suerte han corrido esos menores. Puede que a Sobeida no, pero a mí me preocupa si esos niños están seguros, si van a la escuela, si están bien y saludables.

Se ha hablado de los padres de Sobeida. los medios han dicho que viven en condiciones paupérrimas, que ven a su hija una vez cada tres meses y que la señora está en un delicado estado de salud a causa de una trombosis.

¿Y Sobeida? Bien, gracias. Se daba la buena vida, vivía en sitios caros, manejaba autos de lujo. Se hacía la liposucción y se daba masaje y se aumentó el busto. Iba a fiestas. Debo admitir que su cutis es muy bonito. Debe ser como Cleopatra, quien se daba extensos y costosos tratamientos de belleza en aquella época. Sobeida no se baña en tinas de leche de burra, pero posiblemente se hace tratamientos de microdermabrasión que cuestan cientos de dólares por sesión.  La blancura de sus dientes también tiene que haberle costado un dineral. Sus uñitas son de resina orgánica con una manicura a la francesa.

Sobeida, qué mal te va. Eres bella por fuera, pero por dentro--tus actitudes-- nadie las entiende. Cuando te entregaste a las autoridades, en lugar de preocuparte, de taparte la cara con el abrigo como la delincuente que eres, te reíste con los fotógrafos y los saludaste con las manitas esposadas. "Hola mis amores..." El website www.imagenesdominicanas.com la llama "la nueva megadiva". El nombre es tremendo acierto. Ella se cree sexy con su casco y chaleco anti-balas. Es tan bruta, que no sabe que su vida está en peligro, porque en el mundo de los narcotraficantes todo aquel que posee información es un potencial enemigo y hay que liquidarlo.



Crédito Foto tomada de: http://elviajero.com.do/photos/00005288-constrain-200x250.jpeg


¿O será que está feliz de que su vida artificial por fin acabó? ¿Será que le entusiasma volver a ser la joven pobre y sin preocupaciones que fue una vez, hace más de diez años? ¿Será que siente que por fin se van cayendo una a una las capas de su aparente ex-felicidad y anda ligera como una pluma? ¿Será que estaba hastiada ya?



Crédito: Imagen es de El Nuevo Día, www.endi.com

Claro, siempre existe la posibilidad de que sea una sociópata más de la vida y que, por lo tanto, le importa poco el embarre donde está metida y las implicaciones que esto tiene. El sociópata piensa que las leyes no se hicieron para seguirse y que siempre hay una forma de burlarlas. ¿Será que se ría de la misma Justicia? ¿Será que piensa que todavía todo puede arreglarse con unos cuantos cheles? ¿Será que espera que sus contactos vengan a rescatarla mediante complicados malabares jurídicos, cuales Batman y Robin de la corrupción?

También existe la posibilidad de que sea una sicótica de la vida y no sea capaz de entender la magnitud del embarre donde está metida, y sus implicaciones. ¿Será que se ríe de lo que le dicen las voces que escucha? ¿Será que se ríe porque la realidad que ella ha construido en su cerebrito de mime tiene un final feliz?

Sobeida, dime: ¿por qué te ríes?

No comments:

Post a Comment